Te explicamos qué es el juego y cuáles son sus características. Además, los tipos de juegos que existen y sus diversos beneficios para el individuo.
¿Qué es el juego?
El juego es una actividad recreativa, llevada a cabo en solitario o en grupo, en la cual se establece una dinámica de competencia, cooperación o compañerismo entre los individuos involucrados. Aunque su propósito inmediato es lúdico, o sea, el mero entretenimiento, puede también servir para otros fines secundarios, como la enseñanza, la socialización o el desarrollo físico.
Los juegos están presentes en todas las culturas y civilizaciones, e incluso pueden observarse en algunas especies animales. El caso más antiguo que se conoce de instrumentos con fines lúdicos proviene de la Antigua Mesopotamia (alrededor del 3000 a. C.) y es llamado el “juego real de Ur”. Otro antecedente histórico importante son los Juegos Olímpicos, las competiciones deportivas en honor a los dioses que se celebraban en la Antigua Grecia entre los siglos 776 a. C. y 393 d. C.
Los juegos acompañan al ser humano a lo largo de toda su existencia. Se utilizan como mecanismo de integración social, como actividad de esparcimiento y también como método de enseñanza o ejercitación de nuevas habilidades y conocimientos. Sin embargo, resultan de especial importancia en la infancia, pues a través de ellos los niños incorporan su cultura y aprenden a relacionarse y a socializar. Por esta razón, la ONU incluye el juego entre los derechos de los niños.
Diferencia entre juego y deporte
Existe una relación muy estrecha entre juego y deporte. Las actividades deportivas suelen consistir en competiciones amistosas en las que se enfrenta un equipo contra el otro y se siguen reglas específicas. Visto así, los deportes se realizan siempre a través de juegos. Sin embargo, no todos los juegos son necesariamente deportivos.
- Ver además: Deporte
Características del juego
En términos generales, el juego se caracteriza por lo siguiente:
- Es voluntario. La participación de los jugadores es, en todo momento, por decisión propia. Nadie puede ser obligado a jugar ni a continuar jugando si en un momento dado decide dejar de hacerlo.
- Se rige por reglas. Incluso el juego más imaginativo y fantasioso se apega a un conjunto de reglas acordadas entre los jugadores. Dichas reglas no pueden romperse sin alterar la dinámica de juego, pero pueden cambiar si todos los jugadores están de acuerdo al respecto.
- Es consensuado. Cuando varias personas juegan, el juego elegido y las reglas de juego deben ser conocidas y aceptadas por todos los participantes.
- Tiene límites. El juego ocurre en un lugar y un momento determinados, durante el cual el comportamiento de los jugadores obedece a una situación especial. Por ende, cuando el juego termina, la cotidianidad vuelve a imponerse.
- Es individual o grupal. Dependiendo del caso, el juego puede involucrar a un solo individuo o a un grupo. Muchos individuos pueden jugar por separado en el mismo lugar o, dadas las condiciones, pueden jugar al mismo juego a través de la distancia.
- Es desinteresado. Normalmente, el juego tiene un cometido establecido, o sea, una meta a alcanzar o un rival que vencer. Sin embargo, ese cometido es desinteresado, o sea, ganar no supone ninguna ventaja objetiva ni meta real en ningún ámbito.
- Cambia con la edad. Aquello a lo que juega un individuo varía según sea niño, adolescente o adulto, pues sus gustos y afinidades cambian.
Tipos de juegos
Existen muchas formas de clasificar los juegos, atendiendo a criterios diferentes, como pueden ser: el número de jugadores, la relación entre los jugadores y la dinámica de juego.
Tipos de juegos según el número de jugadores
Dependiendo del número de jugadores involucrados, los juegos se clasifican en:
- Juegos individuales. Son aquellos en los que cada jugador participa de manera independiente, ya sea en solitario o en compañía de otros. Por ejemplo: el solitario de cartas, la rayuela o avión, o el yo-yo.
- Juegos grupales. Son aquellos en los que participan varios jugadores de manera conjunta, ya sea en equipos o de manera dispersa. Por ejemplo: el béisbol, la gallinita ciega o policías y ladrones.
Tipos de juegos según la relación entre los jugadores
Según cómo se relacionen los jugadores, es posible distinguir entre:
- Juegos competitivos. Son aquellos en los que se enfrentan los jugadores y cada uno intenta impedir que el otro logre su objetivo, ya se trate de acumular puntos, deducir información o llegar primero a la meta. Por ejemplo: el básquetbol, el dominó o los videojuegos de lucha.
- Juegos cooperativos. Son aquellos en los que dos o más jugadores deben entenderse para resolver un enigma, superar un obstáculo o transmitir una información. Por ejemplo: la mímica, el fuchiball o la cadena.
Tipos de juegos según la dinámica de juego
Según la dinámica de juego, se puede distinguir entre:
- Juegos deportivos. Son aquellos en los que los jugadores ponen en práctica habilidades físicas, normalmente en torno a una pelota o algún otro instrumento. Por ejemplo: el tenis, las carreras o el kickingball.
- Juegos de mesa. Son aquellos que involucran un tablero y en que los jugadores están normalmente sentados. Se privilegia la estrategia, la lógica y la atención. Por ejemplo: el ajedrez, las damas chinas o el ludo.
- Juegos de azar. Son aquellos que dependen de la suerte y no de un particular talento (físico o mental) de los jugadores. Por ejemplo: el bingo, el póker, o piedra, papel o tijera.
- Juegos mentales. Son aquellos que tienen lugar en la mente de los jugadores, casi siempre sin involucrar elementos físicos, a lo sumo la escritura. Por ejemplo: las adivinanzas, el veo-veo o los crucigramas.
- Videojuegos. Son aquellos que requieren de una consola o una computadora para ser jugados, ya sea de modo individual o grupal. Por ejemplo: los simuladores de guerra, las aventuras gráficas o juegos de estrategia o de deportes.
Beneficios del juego
A pesar de ser una actividad de entretenimiento y, por ende, improductiva, los juegos desempeñan funciones importantes en las distintas etapas de la vida. Estas funciones pueden ser sociales, culturales, psicomotrices, emocionales o intelectuales.
Funciones sociales y culturales
El juego permite la integración del individuo en su cultura y favorece el pensamiento simbólico. Asimismo, le enseña a relacionarse con otros, a instaurar y respetar normas y a perseguir objetivos. Estos elementos son fundamentales para el correcto desarrollo social.
Funciones psicomotrices
A través del juego, los participantes pueden ampliar y ejercitar sus reflejos y sus capacidades motoras y sensoriales, fortaleciendo su atención y su percepción de la realidad. Los niños, por ejemplo, descubren a través del juego nuevas formas de percibir su entorno, al mismo tiempo que coordinan los movimientos de su cuerpo y organizan su estructura corporal.
Funciones emocionales
El juego tiene un valor terapéutico, dado que funciona como un liberador de tensiones y estrés, además de permitir y facilitar la socialización y el intercambio con terceros. Las situaciones lúdicas brindan un entorno amable para expresar y explorar las emociones, tanto para los niños como para los adultos.
Funciones intelectuales
Los juegos fomentan la capacidad de planificación, las acciones complejas y la interpretación de los hechos, lo que estimula el pensamiento reflexivo y representativo. Asimismo, fomentan la imaginación y la creatividad, y permiten a los niños obtener una temprana comprensión de la diferencia entre fantasía y realidad.
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Referencias
- Garvey, C. (1985). El juego infantil. Morata.
- Marín, I., Penón, S. y Martínez, M. (2008). El placer de jugar. Planeta.
- Real Academia Española. (2024). Juego. Diccionario de la lengua española. https://dle.rae.es/
- VV.AA. (2008). El juego como estrategia didáctica (Sel. Cinthia Vidal i Altadill). Laboratorio Educativo.